Estás en un estado de paz, de luz, de plenitud. Todo
parece girar de forma armónica en tu vida y cuando
algo parece salirse de ese equilibrio, entonces, conectas
con tu corazón, entras en ese estado de armonía
para poder sentir que todo es tal y como tiene que ser.
Si sientes desequilibrio, es tu mente la que te arrastra
por sus laberintos de creencias limitantes o resortes sin
activar que desde tu Ser puedes activar y liberar.
Dentro de ti hay un espacio sagrado, una esfera de
luz blanca y maravillosa. Tu chispa divina, tu mónada,
lo que eres, te envuelve para recordarte que eres mucho
más de lo que te han hecho creer.
En ese espacio reina la paz porque desde ese espacio
comprendes que todo es armonía cuando te fusionas
con lo que realmente eres. Respira profundamente
y envuélvete en luz blanca; permite que esa esfera se
expanda y te rodee para transportarte a ese estado de
plenitud y felicidad que reina dentro de ti.
Tu Ser te ama. Ámate, respétate, valórate y siente
que todo lo que necesitas para estar en Paz está en ti.